El muro

Yo,
que le he robado a un sabio,
el desenlace del misterio irresuelto,
puedo afirmar que una rosa,
guarda infinitos instantes de desencuentros.

Yo,
que he comprendido finalmente,
que las palabras no hablan,
sin oídos que escuchen.

Yo,
que he muerto tantas veces,
por senderos de tétricos cristales,
he encontrado aliados,
en las miles de almas que se pierden,
y renacen lentamente.

Cada día insulta una noche,
cada estrella a una luna,
el paraíso de Demasto,
sigue aguardando en el horizonte....

¿Cuando irás hacia él?,
Cobardes palabras escribo,
Valientes pentagramas entono,
antes del día marcado,
yo te encontraré nuevamente.

2 comentarios:

asiri-illa dijo...

Fabulosa obra...

peregrina dijo...

Hermoso poema Nicolas, cuantas verdades dices!.....Yo, que le he robado a un sabio, el desenlace del misterio irresuelto, puedo afirmar que una rosa, guarda infinitos instantes de desencuentros. ......me encantó esta frase!....esta muy bien logrado tu poema. Excelente.BesosJohana